Dunas de Marruecos en Semana Santa

Salimos de Meknes a las 8,30 en dirección al Sur hacia el Atlas Medio. La ruta de hoy han sido, según el rutómetro, 388 km de asfalto y 63 de pista. El paisaje ha ido cambiando de una forma impresionante: primero parecía que en vez de en Marruecos estábamos en Irlanda; una planicie completamente verde y llena de vegetación. Hemos hecho una parada en el Bosque de Cedros y hemos podido ver a alguno de sus famosos monos.

Primera parada téncica y aperitivo en Midelt; de nuevo nos hemos puesto en marcha y nos hemos dirigido hacia el Alto Atlas pasando por las  Gargantas del rio Ziz y la presa de Hassan. Segunda parada, esta vez a comer, a la sombra de un palmeral. A Luis se le ha estropeado el coche y "de postre" Vicente y sus ayudantes lo han conseguido arreglar...de momento.

 

Continuamos viaje y después de mucho trecho árido y sin vegetación aparece un impresionante palmeral que nos acompaña a lo largo de varios kilómetros, salpicado de preciosos pueblecitos de casas de adobe. Repostamos y salimos hacia Arfoud para visitar la Escuela del Desierto de los Niños y dejar algo de material escolar. De nuevo Luis tiene probemas con el coche y Vicente y Patricia se queda para asistirle mientras que los demás seguimos adelante para, por fin, meternos en una pista, ¡nuestra primera pista! Navegamos con la ayuda inestimable de Victoria (mi cuñada) y Silvia (mi sobrina) y parece ser que no lo hacemos tan mal: primero yo pilotando y luego Gonzalo.

 

Es todo un espectáculo ver esa superficie inmensa de piedras y arena ante nosotros, hasta que al fondo se comienzan a divisar las Dunas de Erg Chebbi, en la región de Merzouga; nos quedamos sin palabras. Y más aún cuando comprobamos que nuestro hotel, el Albergue Tombuctu está a pie de dunas en medio de un paraje espectacular.

 

Ducha, descanso -excepto Luis y Vicente que seguían liados con el coche- , cena y copas a la luz de una luna que casi está llena. Nos vamos a la cama felices pero nerviosos porque mañana viene la parte difícil...